Oficinas del horno, criados y de labranza


CRONOLOGÍA

El proyecto general fue aprobado en 1696 y su finalización fue dos años más tarde en 1698.

FUNCIÓN

Las cocinas del infierno

Amplio edificio donde se desarrollaban actividades económicas y domésticas del monasterio y ámbito destinado a los criados que trabajaban en la cartuja. En concreto, en este conjunto podía encontrarse un horno de gran tamaño y un lugar para amasar el pan; depósitos para los alimentos; una serie de estancias para los criados, como un refectorio, un calefactorio para los criados y una cocina específica, con infiernillos y fuego, para guisar carne para invitados y criados que necesitaban alimentación fuerte para cultivar la tierra (los cartujos tienen prohibido el consumo de carne); un establo, una cuadra, un pajar, un cubierto para carros y una habitación para los religiosos encargados de estas dependencias.

DESCRIPCIÓN

El edificio presentaba planta rectangular de largo eje N-S. Construido en ladrillo y de exterior sobrio, propio de una dependencia meramente funcional. Destacaba la arcada de su fachada principal. En la parte posterior del edificio existía una zona de patios cerrada por una cerca de una altura inferior a la de los edificios, aproximadamente la mitad.

ACTUAL ESTADO

Quedan algunos testimonios en pie del antiguo edificio, el resto se ha transformado en viviendas.

CURIOSIDAD

Popularmente se las conocía como las cocinas del infierno. Existen dos hipótesis referidas a este nombre: la primera era que como los monjes cartujos no podían comer carne y aquí sí que se cocinaba ese alimento, podía llevar a la perdición si algún monje sucumbía a la tentación. La segunda sostiene que el nombre procede de los infernillos que se utilizaban para cocinar.