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Juan del Prin Alfranca

Hacer música con apisonadoras, mezclar el techno de la Ruta del Bakalao con el early hardcore y un videoclip de Lola Índigo. Todo ello hecho por artistas de Zaragoza ¿que tienen en común? Que saben que la curiosidad puede ser la mejor forma de mantener activa su creatividad.

Mejor Sordo

Es complicado describir la propuesta de este dúo de música experimental formado por Luis Azcona y Joel Rico. Quizá su último trabajo se explique por sí mismo: Asalto Sordo un álbum que mezcla conversaciones entre vecinos/as, artistas del mural y todo tipo de sonidos que se generaron alrededor del festival de arte urbano Asalto. "La perspectiva final era crear un concierto, una exhibición donde la gente se tenía que ver reflejada", cuenta Azcona.

Entre los 13 temas que componen el disco suenan sopladoras de hojas, tijeras cortando, columpios, y otros objetos unidos a voces e instrumentos musicales que generan un ambiente sonoro único. Para ello, cuenta el dúo, usaron la técnica de collage de sonidos sin procesar para que "el discurso del barrio se quedará lo más limpio posible".

Dos músicos que siempre han buscado el sonido más allá de los instrumentos tradicionales. "Cuando vamos por la calle buscamos sonoridades en cualquier lado", cuenta Joel Rico, "A mí me han interesado mucho los ventiladores que pueda haber en la salida de aire de una panadería. Hay un volumen hecho con sonidos de trenes de Renfe. A Luis le interesan mucho las obras". ¿El objeto más extraño que han usado para hacer música? "Una farola", afirman.

En sus conciertos suenan platillos y sintetizadores pero también baldosas a modo de marimbas o una batería envuelta en papel albal. Para Azcona esta experimentación musical sirve para eliminar el elitismo que se le ha adjuntado a ciertos géneros musicales y "que el discurso sonoro y el tocar con instrumentos puede ser accesible a todo el mundo", cuenta, "Ahí es donde para mí nace la curiosidad, que todo sea parte de un discurso sonoro".

Cosme Fajardo

Cosme Fajardo forma parte del equipo de Santa Mónica Films, una productora audiovisual zaragozana que ha realizado trabajos para, entre otros, Cervezas Ambar, La Bien Querida, Fresquito y Mango, Lola Índigo o Belén Aguilera.

Fajardo tiene claro que para trasladar la visión de un artista a la pantalla hay que conocer a su creador, "entender de qué trata la canción, cuál es su perspectiva, si es un tono más irónico, más vivencial, costumbrista. Qué temáticas abordar y cómo eso se puede trasladar a una propuesta visual que involucre dirección de arte de fotografía, una secuencia de montaje". Fajardo entiende la curiosidad como una herramienta más: " A base de investigar encuentras webs de nicho o libros que te pueden servir de inspiración. Puedes aprender técnicas creativas que te ayuden a desarrollar ideas enteras que ni siquiera serías capaz de sacar."

"Defiende tu trabajo y consigue contactos para que las ideas y el enfoque de trabajo que tengas lo puedas llevar a cabo", es el consejo que Fajardo le da a quien quiera entrar en este mundo.

Bicha

Bicha es una DJ habitual de las fiestas de la música electrónica zaragozana como Sónica Sound o Face Down Ass Up. Ha actuado en el Rawkore City de Mallorca o Spook Club en Valencia. Sin embargo, Bicha rechaza etiquetarse: "no busco un género sino un tipo de energía en mis sesiones. Puedo mezclar techno, hardgroove, electro, ghetto, idm, ebm, trance incluso early hardcore".

Para ella subirse al escenario es un modo de trasladar sus inquietudes musicales al público: "cuando estoy pinchando quiero que la gente sienta lo que yo, que sea especial, que quieran volver y que les entren ganas de ver algo más".

¿Una recomendación para saciar la curiosidad por la música electrónica? Bicha tiene varias: "las tiendas de vinilos son una fuente de cultura muy fuerte. Si hablamos de Europa hay un libro que explica el nacimiento y la evolución de la escena electrónica en Berlín, explica la importancia de la caída del Muro y cómo se desarrolla la vida a través de naves okupadas y raves, se llama Der klang der famille de Felix denk y Sven von thülen.