09 julio 2019

El Ayuntamiento refuerza los medios para prevenir la proliferación de la mosca negra

Técnicos del Instituto Municipal de Salud Pública han comenzado a utilizar nuevas máquinas sulfatadoras para el tratamiento contra las larvas en el río
El producto aplicado es un biocida ecológico que no afecta a la fauna ni a la flora. Debido a la escasez de lluvias, la incidencia de la mosca negra ha subido este año aunque se sitúa por debajo de la media anual.

El Ayuntamiento de Zaragoza ha reforzado los medios para prevenir la proliferación de la mosca negra con la adquisición de dos nuevas máquinas sulfatadoras que hoy han comenzado a utilizarse en el río Ebro. La consejera de Servicios Públicos, Natalia Chueca, ha comprobado in situ el funcionamiento de estas máquinas sulfatadoras que permiten, desde las orillas del río, acometer el tratamiento con biocida dirigido a acabar con las larvas de mosca y mosquito.

Con estos nuevos equipos, los técnicos del Instituto Municipal de Salud Pública pueden llevar a cabo estos trabajos sin necesidad de adentrarse en el río como ocurría hasta ahora. Durante el día de hoy, este tratamiento se ha aplicado en varios puntos (Juslibol, zona Expo y puente de Piedra).

El producto utilizado es un biocida que afecta exclusivamente a las larvas de mosca y mosquito (bacilo thuringiensis) y no daña la fauna ni la flora acuática. Se trata de una alternativa ecológica que se viene utilizando en Zaragoza desde el año 2011 de manera frecuente en esta época.

Por motivos de salud pública, no se aconseja la nebulización de productos para fumigar zonas habitadas, por lo que el tratamiento más efectivo para combatir esta plaga en la ciudad es aplicar este bacilo en diversas zonas del río.

El Instituto de Salud Pública del Ayuntamiento de Zaragoza realiza muestreos y tratamientos de este tipo en el Ebro y el Gállego cada quince días para hacer frente a la incidencia de la mosca negra, que este verano ha repuntado debido a la situación del río Ebro, con poco caudal por las escasas lluvias y mucho macrófito (algas fluviales).

Respecto al control de mosquito tigre, el Instituto de Salud Pública ha colocado 30 ovitrampas en 11 localizaciones de Zaragoza. Con carácter quincenal se sustituyen y analizan las tablillas en la Facultad de Veterinaria para valorar posible presencia de huevos de mosquito tigre.

Según los últimos datos del boletín epidemiológico del Gobierno de Aragón, los servicios sanitarios de Atención Primaria de la Comunidad Autónoma han atendido 6.339 casos de picaduras de mosca negra o mosquito. Es un 23% más que el año pasado en las mismas fechas (5.212), aunque por debajo de la media de los últimos años, y apenas la mitad que en 2017, cuando la incidencia fue mucho mayor (11.512 atenciones).