16 mayo 2017

El Ayuntamiento aplica el tratamiento contra la mosca negra en el río Ebro

El Instituto Municipal de Salud Pública ha utilizado 200 litros de un compuesto biológico que acaba con las larvas
Tras realizar las prospecciones correspondientes, la semana pasada ya se trató el río Gállego con 60 litros
Se van a realizar revisiones periódicas cada 15 días, para estudiar si se debe insistir en el tratamiento

El Instituto Municipal de Salud Pública (IMSP) del Ayuntamiento de Zaragoza, en colaboración con el cuerpo de Bomberos, ha realizado el habitual tratamiento contra la mosca negra en el término municipal.
Con el objetivo de prevenir la proliferación de este insecto, cuyas mordeduras provocan unas reacciones alérgicas muy molestas, los técnicos municipales han realizado a lo largo de la mañana el recorrido para aplicar el tratamiento desde Juslibol hasta el Azud, haciendo paradas en lugares como la pasarela del Voluntariado o el Puente de Piedra. El producto utilizado es un biocida que afecta exclusivamente a las larvas de mosca y mosquito, el bacilo thuringiensis. Una alternativa ecológica que se viene utilizando en Zaragoza desde el año 2011 de manera frecuente en esta época.


Por motivos de salud pública, según apuntan los responsables del IMSP, no se aconseja la nebulización de productos para fumigar zonas habitadas, por lo que el tratamiento más efectivo para combatir esta plaga en la ciudad de Zaragoza es aplicar en zonas del río este bacilo. La la falta de lluvias y de avenidas que hayan limpiado el cauce, sumado a la abundancia de macrófitos (algas fluviales), pueden ser factores que influyan en una mayor abundancia de estos simúlidos este año.
Todos los meses de mayo, el Instituto Municipal de Salud Pública realiza prospecciones en las zonas fluviales del término municipal de Zaragoza, como medida de control y prevención. En total, este año, hasta el momento, se han utilizado 260 litros del compuesto: 200 en el río Ebro y 60 litros en el río Huerva, cuyo tratamiento se realizó ya la semana pasada.


A partir de ahora, de cara al verano, se van a realizar controles periódicos para vigilar la persistencia de estas larvas, en cuyo caso se prevé la posibilidad de repetir el tratamiento a lo largo de la temporada estival.